Si dispones de una barbacoa seguro que siempre la utilizas para preparar alimentos al grill o a la parrilla. Esta es la técnica de cocina a la brasa más común y empleada que consiste en colocar las brasas debajo de la parrilla y una vez hayan alcanzado una temperatura óptima colocar encima los alimentos para que se vayan cocinando al tiempo que se van impregnando de ese sabor y aroma ahumado tan característico.
Sin embargo, más allá de la parrilla, existen otras técnicas de cocina a la brasa que te permitirán dar un giro de 360º a tus preparados y dejar a tus comensales con la boca abierta. Por eso, desde Hornos Jumaco, fabricantes de parrillas y barbacoas, queremos compartir contigo alguna de las principales técnicas para cocinar a la brasa.
Salteado
Estamos más que seguros de que el salteado es una técnica de cocinado con la que estás familiarizado y que has empleado en numerosas ocasiones. El salteado se basa en cocinar los alimentos a base de golpe de muñeca empleando una sartén con aceite muy caliente.
Pero… ¿Y si te dijéramos que también se pueden hacer salteados en la parrilla? Para ello necesitarás una castañera (una sartén con agujeros en su fondo) previamente engrasada con aceite que deberás poner a calentar en una brasa fuerte. Cuando la castañera esté caliente solo te quedará introducir los alimentos a cocinar e irlos salteando al tiempo que los vas hidratando con aceite en espray.
Además, si no dispones de castañera también puedes saltar tus alimentos a la brasa con la ayuda de un colador de acero o de un wok. En caso de utilizar un wok debes saber que el procedimiento es el mismo, pero cambia el acabado puesto que al no tener agujeros los alimentos no entran en contacto directo con el humo, pero a cambio no se pierden los jugos de los alimentos.
Esta técnica está especialmente indicada para para cocinar verduras, patatas y mariscos como gambas o langostinos.
Confitado
El confitado es una técnica empleada frecuentemente en la alta cocina pero que por su sencillez está al alcance de cualquier cocinero tanto profesional como aficionado. Para confitar únicamente tendremos que introducir el alimento deseado en algún tipo de grasa como puede ser, por ejemplo, aceite de oliva, manteca de cerdo o mantequilla clarificada e irlo cocinado a 60-90oC hasta que quede completamente tierno.
Al igual que sucedía con el salteado, podemos confitar productos en nuestra parrilla o barbacoa. Para ello deberás contar con una olla o cazo que resista altas temperaturas y colocarlo sobre la parrilla en una zona donde la temperatura sea más baja y controlar que en ningún momento se superen los 90oC.
Y, si quieres darles un toque extraordinario a tus alimentos, una vez confitados puedes pasar los alimentos a la parrilla durante unos segundos para que adquieran un acabado crujiente y se impregnen del sabor y aroma del humo.
Algunos productos que quedan genial confitados son las patatas, las zanahorias, las cebollas, el pato y el conejo.
A baja temperatura
En la cocina profesional cada vez se emplea esta técnica gracias a los acabados excelentes que se consiguen. Sin embargo, está técnica también puede ser realizada en casa por cocineros que no sean profesionales ¡Te contamos cómo!
Lo primero que tendremos que hacer es cocinar los alimentos envasados al vacío y a baja temperatura (entre 50 y 100oC) durante horas hasta que los productos estén perfectamente cocinados.
Una vez listos los alimentos solo habrá que darles un toque final en la parrilla para tener un plato delicioso y en su punto con el aroma ahumado de las brasas, el exterior crujiente y un interior tan tierno que prácticamente se deshaga.
Esta técnica cuenta con muchas ventajas:
- Al cocinar al vacío a baja temperatura se evita que los alimentos se pasen o se cocinen de más.
- Al estar envasados al vacío los productos conservan y retienen todas sus propiedades, nutrientes y jugos.
- Puedes preparar gran cantidad de cada alimento y reservarlos para que cuando los quieras cocinar simplemente tengas que darles el toque final de parrilla. Conseguirás platos excepcionales en pocos minutos.
El pulpo, los lomos de pescado y las costillas de cerdo son solo 3 de los múltiples alimentos que puedes preparar con esta técnica y que son un auténtico deleite para los cinco sentidos.
Si estás buscando una parrilla o barbacoa para tu restaurante o para tu casa no dudes en contactar con nosotros. En Hornos Maestro Jumaco contamos con un amplio catálogo de barbacoas de obra para chalets y de barbacoas industriales para hostelería. Nuestros especialistas te asesorarán en la elección de la mejor parilla en función de tus necesidades. Además, te la podemos fabricar 100% a medida para ti.
Fuente:
Benayas, J. M., Celada, E., & Hernández, A. (2018). Entre brasas: los secretos de la cocina del fuego. Planeta.